EL CAMBIO

 

Charles Pierre Louis, un médico Francés muy famoso por sus investigaciones sobre la tuberculosis y la fiebre tifoidea pero él también es conocido como el nombrador  de la palabra menopausia que emergió en su consultorio en 1820 cuando 3 hombres distintos solicitaron una cita. El primero que apareció fue Leonel 30 minutos adelantado de la hora de la cita, tuvo que quedarse esperando ya que Charles estaba sumergido en su lectura sobre fiebre tifoide y su secretaria no quiso interrumpir, a las 15:30 Charles pidió  que Leonel ingresara en el consultorio, la recepción fue acalorada ya que ellos eran amigos de la niñez. 

- Leonel, que gusto verte, claro que sería mejor encontrarte en un lugar más amistoso y  no en mi consultorio, estás con una cara horrible ¿que sientes? preguntó Charles con interés. 

Charles, yo no tengo nada, estoy preocupado por mi señora, ella está muy enferma, está con cambios de humor y por la noche suda como un cerdo. Terminó la frase mirando abajo aguardando el diagnóstico.

-Leonel, en este caso ella tiene que venir hasta acá, para que yo pueda hacer una evaluación. Mirando a su agenda dijo : - Dile que venga el viernes a las 10:00 y cerró su agenda. 

Leonel asintió con la cabeza y salió con pasos lentos del consultorio. 

Al día siguiente, alrededor del mismo horario el tío de Charles llegó a su consultorio con un mal humor terrible, y fue luego hablando a la secretaría de Charles que tenía asuntos familiares a ser tratados con su sobrino. La secretaría se apresuró a avisar a Charles que recibió a su tío de inmediato. 

-Tío pase a la oficina, por favor. Y antes de cerrar la puerta su tío  ya empezó a hablar.

- Tu tía me está  dejando loco y preocupado a la vez, ella no duerme bien en la noche, no me deja dormir y lo peor es que cambia de humor a cada hora y a veces percibo que está sudando mucho, le dije que viniera pero se lo dije justo cuando ella estaba de mal humor, luego lo tomó como ofensa. Miró a la cara del sobrino que estaba muy pensativo, pero luego Charles miró su agenda y dijo. 

- Dígale a la Tía que venga a verme el viernes a las 10:00, claro antes mire su estado de ánimo.

Su tío asintió con la cabeza y se fue a su casa. 

Ya estaban dando casi a las 17:00 cuando Charles decidió  cerrar su consultorio e irse a la barbería, pero fue impedido por el panadero que entró en su consultorio ya disculpándose por no haber pedido cita, pero que el tema era urgente. 

-Doctor, disculpe por la hora, es que hoy fue muy agobiante.  

Charles dijo Comprensivo: - No se preocupe hombre, diga lo que siente.

-No doctor, yo no tengo nada, es mi madre que está dejándome afligido, ella está teniendo unos escalofríos, está con la piel seca, suda un poco por la noche y no duerme, ayer le dije a ella para pedirle una cita, pero dijo que era cosa de la edad. 

Charles miró al joven panadero intrigado y dijo : - Su mamá dijo que es cosa de la edad? que curioso, dígale a su mamá que venga el viernes a las 10:00. Y el joven asintió con la cabeza igual que los otros dos hombres, y salió pensativo del consultorio. 

Después de dos días ya era viernes y las 3 señoras llegaron a la hora prevista, Charles las recibió a las 3 en su consultorio, las 3 señoras tomaron asiento y Charles comentó.-Señoras, recibí en mi consultorio a 3 caballeros que comentaron casi la misma cosa, por eso he decidido invitarlas a las 3 a la vez para conversar al respecto de sus síntomas.  

Las tres damas se miraron y respiraron hondo, la tía de Charles dijo: - Su tio es un tonto que se mete en cosas de mujer, ya sabemos lo que tenemos, no es cierto? y miró para las otras dos señoras. 

-Por supuesto que sí. Dijo la madre del panadero.

-Mi marido piensa que estoy enferma, se queda mirándome preocupado y cuando le

voy explicar dice que no entiende. Dijo la señora de Leonel. 

-¿Cómo ya sabe lo que tiene? preguntó el doctor.

-Mi querido sobrino tenemos algo que llamamos “el cambio’’ que se refiere a la época en la vida de una mujer en que deja de tener su regla y ya no puede tener hijos y esto empieza a los 45 hasta los 60, cuando “el cambio” ya es definitivo. La tía de Charles dio una clase sobre el tema y al final de la charla las 3 señoras salieron de la habitación quejándose de los hombres. Charles quedó atónito con tanta información nueva y se fue hasta su biblioteca particular y se quedó estudiando el tema durante algunos meses, hasta que encontró un nombre más apropiado, menopausia, Charles usó las terminaciones en griego (men= mes) y (pausis = pausa o cese). Y al final publicó un artículo sobre la cuestión y fue también conocido por este “descubrimiento” que en verdad toda mujer siempre supo que existía, pero al final Charles tomó los créditos. Sin embargo, han pasado más de 200 años desde que fue nombrada, pero una medicina efectiva para los síntomas no hay hasta hoy.